No se trata sólo de mantener una buena higiene bucodental. Acudir a la consulta del dentista puede ser una buena oportunidad para detectar otras enfermedades ya que muchos de los problemas que aparecen en la boca son síntomas de enfermedades que afectan a otras partes del organismo, como la diabetes. Por otro lado, no sólo son el espejo de otras patologías sino que además aumentan el riesgo de la aparición de algunas de ellas como las enfermedades cardiovasculares
«La periodontitis, es decir, la infección de las encías causada por bacterias, favorece la descompensación en diabéticos y a su vez la diabetes duplica el riesgo de tener periodontitis», explica David Herrera profesor titular de periodoncia de la Universidad Complutense de Madrid y vicepresidente de la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA). Pero no es el único trastorno que puede detectarse en la consulta de estos especialistas. Este problema en las encías tiene componentes inflamatorios, «por tanto, si tus encías están inflamadas hay más riesgo de aterosclerosis [depósito de placa en las arterias], un riesgo dos veces mayor».
En cuanto al impacto de esta medida, los especialistas consideran que, según los estudios recientes, la mitad de la población con diabetes no está diagnosticada por lo que estaríamos hablando de unos siete millones de españoles que no saben que tienen este problema. «En los años 80 se definió la periodontitis como la sexta complicación de la diabetes. Por lo tanto, muchos de nuestros pacientes tendrán esta enfermedad y si los detectamos precozmente podríamos evitar otras muchas complicaciones y estos pacientes generarían menos gastos al sistema sanitario», sugiere Héctor Juan Rodríguez, periodoncista y coautor del estudio ‘Diabetes y Enfermedades Periodontales».
No obstante, estos especialistas señalan que actualmente en nuestro país no existe ningún programa para que dentistas y periodoncistas deriven sistemáticamente a las personas que tengan varios factores de riesgo. «Las sociedades científicas deberían analizar el conocimiento científico y poner en marcha protocolos de actuación en este sentido.
Por último, estos especialistas aconsejan que para evitar la aparición de estos problemas periodontales se debería realizar diariamente una correcta higiene de la boca. «Hay que insistir en esto porque el minuto nunca suele tener 60 segundos y para limpiar nuestros dientes deberíamos cepillarlos durante tres minutos. Y a eso añadir la seda dental y un colutorio sólo cuando haga falta, bajo prescripción del especialista, no hay que olvidar que es un antibacteriano y que, al igual que otros medicamentos, sólo hay que usarlo cuando corresponda. Y no hay que olvidar la revisión anual con el dentista que, en algunos casos, deberá ser más frecuente», explica Rodríguez.